***Además, subrayó, que deben afrontar la “desaparición total de la seguridad social”, lo que incluye el “desplome de la educación como derecho humano”.
[su_heading]Tegucigalpa,Honduras[/su_heading]
En un lugar próximo a la céntrica plaza Morelos, donde inicialmente tenían previsto reunirse, la líder sindical Raquel Figueroa aseguró que los maestros afrontan “la destrucción total” de sus salarios, que en este momento es inferior a un dólar mensual.
Además, subrayó, que deben afrontar la “desaparición total de la seguridad social”, lo que incluye el “desplome de la educación como derecho humano”.
Figueroa también criticó el modelo impuesto por el régimen de Maduro denominado “Cada familia, una escuela”, que busca promover la educación desde los hogares debido a la pandemia de COVID-19, así como al modelo de flexibilización parcial que denomina 7+7.
En su opinión, en este momento no existen “las mínimas condiciones para establecer el desarrollo de la pedagogía en una modalidad a distancia” ante la gran brecha tecnológica que vive el país en la que inciden los constantes apagones, la lenta velocidad del internet y la falta de acceso a equipos modernos.
Sin embargo, las protestas no se produjeron solamente en Caracas. Docentes y maestros de los estados Trujillo, Carabobo, Portuguesa y Delta Amacuro, entre otros, también salieron a las calles para exigir mejores condiciones de trabajo y “salarios dignos”.
Docentes del municipio Guacara, en el estado Carabobo. “Estamos aquí para demostrarle a Aristóbulo que con el sueldo miserable que tenemos nos tienen sin derecho a la alimentación, a la salud, a la educación. Aristóbulo, te hacemos un llamado, porque tú fuiste docente y abandonaste a todos los docente”, señaló Dayibeth Pérez, una de las docentes presentes en la protesta del municipio Guacara (Carabobo), quien envió un mensaje directo a Aristóbulo Istúriz, ministro de Educación de la dictadura de Maduro.
A estos siete días de flexibilización seguirán otros siete de cuarentena y posteriormente una semana de reapertura parcial, cuando, de nuevo, los centros escolares estarán abiertos para esa orientación.
Casi cuatro horas después del inicio de la concentración y en el sector de Caurimare, afín a la oposición y muy lejos del centro de Caracas, donde estaban llamados los maestros y en el que el chavismo es mayoría, acudió el presidente interino Juan Guaidó a mostrar su apoyo a los educadores.
“No nos detiene incluso la lluvia, así que maestros no están solos; profesores, no están solos, el futuro de nuestros niños en este país está garantizado con ustedes”, aseguró el líder opositor cuando comenzó a llover tímidamente, horas después de que, en el centro, el tradicional sol caraqueño acompañara a los maestros.
Guaidó celebró que los maestros desafiaran a primera hora “la intimidación de la dictadura”, que, en su opinión, se muestra “claramente” con la presencia de los simpatizantes del chavismo a los que consideró “colectivos armados”, nombre con el que se denomina a grupos considerados como paramilitares o parapoliciales.
Dicha consulta, que incluye preguntar a los venezolanos si “todos los mecanismos de presión nacional e internacional para que, en el marco de la Constitución, se realicen elecciones presidenciales y parlamentarias libres, justas y verificables”, supone, según aseguró hoy Guaidó «un mecanismo para lograr la transición en Venezuela.
Finalmente, pidió a los ciudadanos que “esperen convocatorias” nuevas en las calles, a las que se desconoce si él acudirá.
Guaidó también había llamado a los “Comandos por la Libertad y Elecciones Libres”, integrados por personas que se encargan de explicar que los comicios de diciembre son “un fraude”, de apoyar el pueblo en sus protestas y de “luchar” por votaciones “libres”, para que se unieran a los maestros.
Sin embargo, no hubo presencia de estos grupos, lanzados oficialmente el pasado sábado, a los que Guaidó instó específicamente a “acompañar a los educadores en las protestas” de los maestros “en cada rincón del país”.Infobae/Hondudiario