***Dijo que tras las emergencias climáticas y el paso de las tormentas tropicales Eta e Iota, además, la sanitaria ocasionada por el COVID-19, han marcado “un leve ascenso en las actividades ilícitas en Honduras”.
[su_heading]Tegucigalpa, Honduras[/su_heading]
En ese sentido, aseguró que los grupos criminales buscan evadir las autoridades migrando a zonas donde no hay incidencia delictiva.
Detalló que el 62.8 de los homicidios se dan por problemas de convivencia, en zonas rurales y urbanas, problemas entre familias, vecinos, peleas de herencias.
De igual forma, que el 20.5 por ciento, es producto del crimen organizado y el 16.7 por ciento restante, por causas indeterminadas y en proceso de investigación.
“Esos fenómenos han sido un detonante social en todo aspecto, muestra de ello son los 117 suicidios que se contabilizan durante este año”, comentó.
El inspector policial indicó que delitos como el secuestro, el tráfico de drogas han sido los delitos de mayor impacto que reflejan más reducción en los últimos años. GO/Hondudiario