***El serbio obtuvo su sexto triunfo en la Catedral y ratificó su condición de número uno del mundo. Venció a Matteo Berrettini por 6-7 (4-7), 6-4, 6-4 y 6-3
[su_heading]Tegucigalpa, Honduras[/su_heading]
El serbio tuvo una final sin mucho sobresalto, aunque debió sacar su mejor versión cuando su rival amenazó con rebelarse. El italiano, en su primera final de esta categoría, resistió en el set inaugural, salvó una bola de parcial y logró ponerse por delante ganando el set en el ‘tie-break’.
Al joven de 25 años le falló su saque cuando le tocó confirmar su momento, y Djokovic encarriló rápido el segundo set (4-0). Berrettini no dejó de competir, pero el número uno fue creciendo en su repertorio para responder a cada show de su rival. Con esa mentalidad ganadora cerró el segundo y luego el tercer set a su favor.
Esta fue la séptima vez que el serbio disputó el partido por el título en Wimbledon. En la Catedral se había consagrado previamente en 2011, 2014, 2015, 2018 y 2019. Tan solo perdió la definición de la temporada 2013 ante Andy Murray.
“Felicitaciones a Matteo, a todo su equipo y su familia. Ganar acá es el sueño más grande que tuve en mi vida. Es soñado y cuando era pequeño en Serbia no podía ni estar en un solo cuarto y hoy conseguí mi sexta victoria”, contó Djokovic tras el partido.
“Ninguno de los tres vamos a detenernos. Esto es un tributo a Roger y Rafa que son una leyenda. Ellos son los dos jugadores más importantes que enfrenté en mi carrera. Son la razón de haberme esforzado en mi carrera y de dónde estoy hoy. Los últimos diez años fueron inolvidables y esto no se detiene acá”, agregó Nole.
Este triunfo en el torneo de Londres dejó a Nole más cerca de alcanzar el Golden Slam, la forma en que se denomina al hecho de ganar los cuatro torneos de Grand Slam y la medalla olímpica de oro en una misma temporada. El serbio ya se alzó con los títulos en el Abierto de Australia, en Roland Garros y ahora en Wimbledon. Deberá consagrarse en el US Open y los Juegos Olímpicos de Tokio para lograr ese mérito al que tan solo ha podido llegar una tenista en toda la historia: la alemana Steffi Graf. Infobae/Hondudiario