domingo, junio 15, 2025
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Honduras en vigilancia permanente ante latente amenaza de la viruela del mono

Tegucigalpa, Honduras

***Se recomienda a la población que al presentar los síntomas acudir de inmediato al establecimiento de salud más cercano.

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Las autoridades de Salud de Honduras se declararon en vigilancia permanente ante la expansión de casos de la denominada “viruela del mono” que ya se encuentra en 11 países del mundo, entre ellos, Estados Unidos y Canadá.

Este virus se detectó por primera vez en la República Democrática del Congo en 1970 y se ha multiplicado durante la última década en países de África occidental y central, sin embargo, en Europa cada vez son más los casos de dicha enfermedad, que ya tiene presencia en América.

Los países que han reportado casos son: Australia, Alemania, Bélgica, Canadá, Francia, Estados Unidos, España, Italia, Portugal, Suecia y el Reino Unido.

En la Región de las Américas se notificaron 3 casos de viruela del mono, de los cuales dos casos en Canadá y un caso en Estados Unidos, convirtiéndose en una latente amenaza para el país, poniéndonos ante una alerta epidemiológica en salud pública.

Sin embargo, a través de un comunicado, las autoridades sanitarias aseguraron que actualmente no se registra ningún caso de viruela del mono en Honduras.

En este contexto, la Secretaría de Salud realiza las siguientes acciones: La elaboración y envío del Alerta Epidemiológica a las diferentes Regiones Sanitarias y hospitales a nivel nacional, sobre la situación mundial, definición de la enfermedad, casos sospechosos y confirmados en los países notificados, síntomas y signos de la enfermedad, para realizar el abordaje ante la presencia de casos, en el manejo y tratamiento

Se convocó a representantes de las diferentes dependencias de la Secretaría de Salud, así como a instituciones públicas, privadas y organizaciones de Cooperación Externa con el propósito de conformar un equipo técnico de integración nacional para elaborar el Plan de Contingencia Nacional de Respuesta ante una posible emergencia sanitaria por esta enfermedad.

Se realizan acciones dirigidas a fortalecer la vigilancia epidemiológica en los puntos de entradas aéreas, marítimas y terrestre, instruyendo a todas las Oficinas Sanitarias Internacionales (OSI)

Asimismo, se ha elaborado una ficha epidemiológica específica para la enfermedad de la viruela del mono para la notificación de casos y una especial para la población migrante retornada y de tránsito por el territorio nacional.

Notificación a las agencias de aerolíneas nacionales e internacionales sobre la vigilancia estricta dirigida a la detección, notificación, y seguimiento de casos sospechosos con las respectivas coordinaciones y reporte a las Oficinas Sanitarias Internacionales ubicadas en los diferentes puntos de entrada.

Establecer la Coordinación con propietarios de hoteles que hospedan migrantes de tránsito y con los propietarios de medios de transportes que los movilizan a los lugares de destino.

Establecer coordinación con los Centros de Atención al Migrante e implementar a nivel nacional un plan de comunicación de riesgo: con énfasis en los componentes de Promoción, Prevención y Educación.

Elaboración de Lineamientos Nacionales para el abordaje de la enfermedad, para ser implementados en los diferentes establecimientos de salud del primer nivel (centros de salud) y segundo nivel (hospitales).

La viruela del momo es una enfermedad zoonótica viral rara. Modo de transmisión: En los casos iniciales, la infección se produce por contacto directo con la sangre, los líquidos corporales o las lesiones de la piel o las mucosas de animales infectados (monos, ratas y ardillas infectados). Se considera que los roedores son el principal reservorio del virus. Un posible factor de riesgo es la inadecuada cocción de la carne de animales infectados.

La transmisión secundaria o de persona a persona, puede producirse por contacto estrecho con secreciones infectadas de las vías respiratorias o lesiones cutáneas de una persona infectada, o con objetos contaminados recientemente con los fluidos del paciente o materiales de la lesión.

El periodo de incubación de la enfermedad suele ser de 6 a 16 días, pero se ha descrito que puede variar entre 5 a 21 días, caracterizado por fiebre, dolor de cabeza, inflamación de los ganglios linfáticos, dolor de espalda, dolores musculares y falta de energía. Una vez que pasa la fiebre, puede desarrollarse una erupción que a menudo comienza en la cara y luego se extiende a otras partes del cuerpo, más comúnmente a las palmas de las manos y las plantas de los pies.

Las medidas de prevención: lavado frecuente de manos con agua y jabón, distanciamiento físico y uso de mascarilla.

Se recomienda a la población que al presentar los síntomas acudir de inmediato al establecimiento de salud más cercano.

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