***La viceministra aseguró que todavía “ahí están” los sicarios del Ministerio Público y por eso dicen que ella odia esa institución, algo que descartó rotundamente.
[su_heading]Tegucigalpa, Honduras [/su_heading]
Un informe de la Secretaría de Seguridad, en poder del medio Infobae, revela que la agente de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC), Sherill Yubissa Hernández Mancía, fue mandada a asesinar por los narcotraficantes y exdiputados Juan Antonio “Tony” Hernández y Alexander “Chande” Ardón.
En sus declaraciones ante la justicia estadounidense, Ardón confesó que mató y mandó a matar a 56 personas, y aunque no incluyó en su listado a Hernández Mancía, la Secretaría de Seguridad hondureña asegura que la agente también fue una de sus víctimas.
El informe al que accedió Infobae confirmó que la muerte de Sherill Yubissa Hernández Mancía fue un homicidio y no un suicidio, como lo afirmó en su momento el Ministerio Público hondureño.
El móvil del crimen, según la investigación periodística del medio argentino, trazó como propósito detener las investigaciones en las cuales la agente de la ATIC trabajaba en 2018, que involucraban a narcotraficantes cercanos al expresidente Juan Orlando Hernández (2014-2022), ahora procesado por delitos de tráfico de drogas y armas en Estados Unidos.
El asesinato de la agente Hernández Mancía generó una controversia pública entre las autoridades del MP y la mujer que dirigía entonces la Dirección Nacional de Medicina Forense, la doctora Julissa Villanueva, quien en la actualidad es la viceministra de seguridad en el gobierno de la presidenta Castro, y en 2018 fue separada de su cargo por negarse a aceptar la versión del suicidio que defendían funcionarios cercanos a Juan Orlando Hernández, como el fiscal general.
En ese sentido, la funcionaria Villanueva narró cuando una persona le dijo que “sicarios del Ministerio Público” asesinaron a la agente, deceso que se manejó por las autoridades como un suicidio, sin embargo, ella, que en aquel entonces era directora de Medicina Forense, afirmó que se trató de un homicidio.
“La infiltración del crimen organizado dentro del MP y sobre todo de estas estructuras que hoy estamos viendo, inclusive personas que hoy son altamente buscadas, estaban involucradas como peones”, indicó Villanueva en Frente a Frente de Canal 5.
Al respecto, detalló que sufrió un atentado en la ciudad de San Pedro Sula, Cortés y recibió amenazas directas e indirectas que la orillaron a solicitar medidas cautelares ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la Organización de Estados Americanos (OEA); la resolución positiva fue emitida el 12 de agosto de 2018, ordenando a Honduras que salvaguarde su vida.
Por otra parte, la viceministra aseguró que todavía “ahí están” los sicarios del Ministerio Público y por eso dicen que ella odia esa institución, algo que descartó rotundamente. Además, estuvo de acuerdo en que asesinos a sueldo históricamente también han estado en la Policía Nacional y Fuerzas Armadas.
El cadáver de la agente de la ATIC fue encontrado el 11 de junio de 2018 y desde el Ministerio Público se empeñaron en asegurar que fue un suicidio, con arma de fuego.
Sin embargo, Julissa Villanueva, ese mismo año afirmó “desde el punto médico legal” que el hecho fue un homicidio y denunció irregularidades en el manejo de la escena, misma que fue “alterada y contaminada”. Hondudiario
