*** Durante su discurso fue enfático en varios puntos, señalando las dificultades que abarca la labor periodística en Honduras.
El Colegio de periodistas de Honduras (CPH), entregó el premio de Álvaro Contreras al periodista Dagoberto Rodríguez, el cual es el máximo reconocimiento al periodismo en Honduras, durante su discurso fue enfático en varios puntos, señalando las dificultades que abarca la labor periodística en Honduras.
Su carrera ha estado marcada por el periodismo de investigación, la defensa de la libertad de expresión y el compromiso gremial, habiendo presidido el Colegio de Periodistas de Honduras en dos ocasiones, en su intervención aprovechó para exigir justicia y que se respete a los periodistas.
“Aprovechamos para demandar la inmediata suspensión y derogación del estado de excepción que atenta contra los derechos individuales de los hondureños, se cierne como una espada de damocles sobre el ejercicio de la libertad de expresión y prensa y amenaza a la democracia en un momento fundamental en el que estamos abocados a elecciones generales para elegir a nuestras nuevas autoridades. Hago hincapié en la trascendental importancia que tiene el periodista como vigía y guardián de nuestra democracia y alzamos nuestra voz con firmeza. Exigimos justicia, exigimos reparación, exigimos el fin de la impunidad que cubre los crímenes contra periodistas en Honduras”, señaló.
Indicó que el Estado arrastra una deuda histórica y dolorosa con el gremio periodístico y con muchos otros gremios, dijo que se tiene hambre y ser de justicia y que no habrá consuelo ni reparación mientras el sistema judicial no rompa con ese abominable círculo de impunidad y continúe actuando como instrumento del poder y no como garante de la equidad, profundizó en que la justicia no puede seguir mirando al periodista desde el prisma de quien gobierna, sólo cuando juzgue con imparcialidad como lo ordena su esencia institucional y su mandato divino empezaremos a sanar.
Dijo que, “los periodistas somos la primera y la última trinchera en defensa de la institucionalidad, los custodios del imperio de la ley, somos los perros guardianes de la democracia, sin periodismo no hay democracia y no hay libertades”.
Sobre las amenazas a los periodistas indicó que, “todos ellos les digo hoy desde esta tribuna, no podrán silenciarnos, no podrán doblegarnos y no podrán someternos a sus desindios y a sus oscuros intereses, porque mientras exista un atisbo de injusticia, un acto de autoritarismo o una violación a la ley, ahí estará un periodista hondureño con la pluma firme y la voz en alto”. ED/Hondudiario