*** “Mejía-Zúñiga y sus cómplices ganaron millones de dólares a costa de miles de personas a las que introdujeron clandestinamente en Estados Unidos”, dijo Matthew R. Galeotti, jefe de la División Penal del Departamento de Justicia.
El migrante hondureño Enil Edil Mejía Zuniga fue sentenciado en el Distrito Oeste de Texas, Estados Unidos por su papel de liderazgo en una conspiración masiva de tráfico de extranjeros que duró tres años e involucró a miles de extranjeros de más de 11 países diferentes.
Enil Edil Mejía-Zúñiga, también conocido como “Chino”, de 34 años, de Olancho, Honduras, fue sentenciado a 10 años de prisión y tres años de libertad supervisada por su papel en el contrabando de miles de extranjeros a los Estados Unidos para obtener ganancias financieras. También se le ordenó pagar una multa de 4 mil 500 dólares.
“Mejía-Zúñiga y sus cómplices ganaron millones de dólares a costa de miles de personas a las que introdujeron clandestinamente en Estados Unidos”, dijo Matthew R. Galeotti, jefe de la División Penal del Departamento de Justicia.
En ese sentido añadió: “Sus acciones ponen en riesgo nuestra seguridad nacional. Sin embargo, gracias a nuestros numerosos socios federales encargados de hacer cumplir la ley, a Mejía-Zúñiga ya no se le permitirá enriquecerse en detrimento de este país”.
Según documentos judiciales, desde noviembre de 2020 hasta marzo de 2023, la organización de contrabando de extranjeros Mejía-Zúñiga (ASO), contrabandeó extranjeros desde Afganistán, Yemen, Egipto, India, Pakistán y Colombia, a través de Eagle Pass, Texas. Los extranjeros contrataban principalmente a un contrabandista paquistaní radicado en Brasil para ser transportados a Estados Unidos.
Las coacusadas Mónica Hernández-Palma, de 33 años, de México, y Allyson Elsires Álvarez-Zúñiga, de 26 años, de Honduras, se declararon culpables el 7 de abril de 2025 y el 21 de agosto de 2023, respectivamente, y están a la espera de sentencia. El coacusado Genyi Arguenta-Flores, de 32 años, de Comayagua, Honduras, fue sentenciado a cinco años de prisión el 12 de mayo. Un último coacusado se encuentra detenido en México en espera de una solicitud de extradición de Estados Unidos. EFE