*** Los Ejércitos de Tailandia y Camboya mantuvieron desde el 24 de julio y durante cinco días fuertes enfrentamientos.
El primer ministro de Malasia, Anwar Ibrahim, dijo este martes que la situación entre Camboya y Tailandia sigue siendo “delicada y tensa” pero espera que los dos países alcancen un “acuerdo final” en su enfrentamiento fronterizo durante las conversaciones que discurren hasta el jueves en Kuala Lumpur.
“Hasta el momento, la situación está prácticamente bajo control, aunque sigue siendo delicada y tensa. No es fácil, sobre todo cuando se han producido muertes y tiroteos. Lleva tiempo reducir la tensión y calmar la ira”, dijo hoy Anwar en el Parlamento malasio.
Los Ejércitos de Tailandia y Camboya mantuvieron desde el 24 de julio y durante cinco días fuertes enfrentamientos en varios puntos de los casi 820 kilómetros de frontera que comparten, un conflicto armado que causó al menos 45 fallecidos, 18 de ellos civiles.
El Gobierno de Malasia, país que alberga este año la presidencia rotatoria de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), medió entre Bangkok y Nom Pen para alcanzar el lunes de la semana pasada un alto el fuego en el conflicto.
En ese pacto se acordaron varias reuniones, incluido un encuentro entre los ministros de Defensa de ambos países durante el Comité General de Frontera (CGF), un mecanismo de Tailandia y Camboya para acordar enfoques y medidas en aras de mantener la paz y la seguridad en las zonas fronterizas.
Las conversaciones del CGF comenzaron ayer en la capital malasia, con encuentros de equipos técnicos, y culminan el jueves con el encuentro de los representantes de Defensa, en una cita a la que, además de Malasia, se esperaba que acudieran representantes de China y Estados Unidos como observadores.
“Esperamos que varios acuerdos se formalicen el día 7 mediante el consenso de los ministros de Defensa de ambos países. Esperamos que se pueda lograr una resolución definitiva. Como mínimo, detener las actividades armadas y garantizar que no se produzcan más violaciones en las zonas fronterizas en disputa”, dijo Anwar.
El dirigente malasio dijo que más adelante se tomará una decisión respecto a si es necesaria “la presencia militar en tareas de vigilancia” sobre el terreno para el cumplimiento de los acuerdos, un control que de momento se realizan mediante imagen satelital.
“Queremos que ambos (Tailandia y Camboya) lleguen a un acuerdo final y mutuo, con Malasia como testigo, y que dicho acuerdo cuente con el apoyo de todos los países de la ASEAN”, subrayó Anwar.
Bangkok y Nom Pen, cuyos casi 820 kilómetros de frontera fue cartografiada por Francia en 1907, cuando Camboya era su colonia, arrastran una histórica disputa territorial que se recrudeció en mayo con la muerte de un soldado camboyano en una refriega entre los dos Ejércitos en una zona reclamada por ambas partes. EFE