*** García subrayó que su renuncia es también un acto de coherencia personal, al no estar de acuerdo con ciertas decisiones de política exterior.
El vicecanciller de la República en Asuntos Consulares y Migratorios, Antonio García, presentó este martes su renuncia al cargo, efectiva a partir del 12 de agosto de 2025, alegando “diferencias irreconciliables con el rumbo que ha tomado el Gobierno”. En una carta dirigida a la presidenta Xiomara de Zelaya, explicó que su decisión responde a preocupaciones relacionadas con la política exterior y el contexto político nacional.
García señaló que una de sus principales inquietudes es “el impacto que puedan tener en nuestros compatriotas en los Estados Unidos las consecuencias del reciente mensaje sobre Venezuela”. Si bien reconoció la amistad y solidaridad entre Honduras y Venezuela, dijo que “se le buscara por una recompensa” al estilo del Oeste no es conforme al derecho internacional ni a los principios de la carta de las Naciones Unidas.
En su misiva, el exfuncionario enfatizó que las acciones adoptadas “no favorecen el interés nacional ni el bienestar de nuestros connacionales”, especialmente en un contexto de elecciones presidenciales e internas de Libre. Consideró que este tipo de decisiones pueden tener repercusiones negativas en la percepción internacional hacia Honduras.
El vicecanciller también expresó preocupación por “la actual crisis electoral que vive el país y que considero artificial y sin precedentes”. Señaló que el Gobierno, como garante del orden y la democracia, “está obligado a prevenir cualquier forma de violencia e intimidación” y a garantizar un ambiente adecuado para que la ciudadanía ejerza su derecho al voto en paz y libertad.
Asimismo, García agradeció “profundamente la confianza” que se le brindó para desempeñar el cargo y la oportunidad de servir al país en un área tan sensible como los asuntos consulares y migratorios. Resaltó que durante su gestión “se lograron avances importantes” en la atención a los hondureños en el exterior.
En un tono conciliador, manifestó que se retira “con gratitud y respeto” hacia las personas y su equipo, a quienes les deseó los mayores éxitos. También reiteró su compromiso con “el interés supremo del período constitucional” y afirmó que mantendrá “la fe viva en la defensa de los principios” que han guiado su vida profesional.
En la carta, el exvicecanciller reafirmó su adhesión a causas cívicas, que respalda “la lucha de las antorchas” y que “esa lucha continúa para mí”. Reiteró su deseo de que el país siga avanzando en el fortalecimiento de la institucionalidad y el respeto a la democracia.
García subrayó que su renuncia es también un acto de coherencia personal, al no estar de acuerdo con ciertas decisiones de política exterior. Reiteró que su postura busca preservar la integridad de la representación diplomática y evitar cualquier impacto negativo para los hondureños en el extranjero.
Finalmente, concluyó su mensaje con un agradecimiento general: “Agradezco a todos y deseo que Dios bendiga a Honduras”. OB/Hondudiario