*** El endeudamiento pierde su razón de ser cuando no se traduce en proyectos de desarrollo.
El jefe del Departamento de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Henry Rodríguez, afirmó que el país no puede evitar recurrir a la deuda pública debido a la insuficiencia de ingresos frente al gasto estatal y es necesaria para “equilibrar” el Presupuesto General.
“Aunque lo mejor para un país es no endeudarse, una economía como la hondureña con déficit fiscal crónico se ve obligada a hacerlo para equilibrar el Presupuesto”, explicó el economista.
El especialista advirtió, sin embargo, que el endeudamiento pierde su razón de ser cuando no se traduce en proyectos de desarrollo, ya que el dinero del Estado “requiere uso responsable de los recursos que deben destinarse para desarrollar al país” y no únicamente para cubrir deficiencias financieras.
Rodríguez indicó que el gran problema radica en que “la deuda crece y se vuelve improductiva”, pues una parte importante se utiliza para el pago de sueldos, salarios y obligaciones previas, sin generar riqueza ni beneficios sociales tangibles.
El académico subrayó que este patrón compromete la capacidad de crecimiento económico y posterga la inversión en áreas estratégicas, lo que refuerza la necesidad de replantear cómo se administra el endeudamiento público.
En tanto, la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) alertó que el crecimiento del endeudamiento en Honduras está desplazando la inversión en sectores estratégicos y debilitando las finanzas del Estado.
En su informe “Radiografía del endeudamiento en Honduras” señaló que el aumento responde al “gasto excesivo y problemas estructurales de la administración pública”, mientras los préstamos contratados “no han sido ejecutados de manera eficiente”.
El análisis muestra que entre 2021 y 2025 el Presupuesto General de la República se expandió un 49 por ciento, lo que impulsó mayor contratación de deuda. El endeudamiento externo anual promedio pasó de USD 712 millones en 2014-2021 a USD 1,513 millones entre 2022 y 2024.
La ASJ indicó que apenas el 12 por ciento de esos recursos se dirigió a inversión y, en promedio, solo se ejecutó el 53 por ciento del presupuesto financiado con préstamos externos. Subrayó que actualmente 3,005 millones de dólares permanecen sin uso, lo que refleja que “el problema no es la falta de financiamiento, sino la forma en que se gasta”, generalmente en proyectos poco productivos y de bajo retorno social.
El informe recordó que en enero de 2022 el actual Gobierno expresó “preocupación por el alto nivel de endeudamiento”, cuando el saldo ascendía a 15,679 millones de dólares. No obstante, apenas dos meses después reformuló el Presupuesto, amplió el déficit fiscal y contrató más deuda, arraigando una tendencia de crecimiento acelerado en los últimos años. OB/Hondudiario