*** Los índices de violencia se han reducido en el país hasta un 27 por ciento.
La directora del Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Migdonia Ayestas, señaló que, pese a que el país no está en guerra y que los índices de criminalidad han bajado, la nación sigue siendo uno de los más violentos.
Aunque haya muchas reducciones en temas de criminalidad, se reportan al menos seis víctimas diarias de las cuales una en promedio es mujer por lo que a pesar de no estar en guerra, sigue siendo uno de los más violentos de Centroamérica.
“A pesar de todas las reducciones (en índices de criminalidad) estamos en promedio en seis víctimas diarias, de las cuales una en promedio es mujer, eso da cuenta de que seguimos siendo ese país que, a pesar de no tener una guerra, sigue siendo uno de los más violentos de Centroamérica”, enfatizó Ayestas.
Mediante los datos arrojados por el Observatorio, en el 2011 la tasa de homicidios en el país fue de 86,5 por cada 100 mil habitantes, esta cifra se redujo en el 2024 a 27. “Sin duda, son más de 40 puntos los que ha disminuido la violencia y la criminalidad, pero eso solo medido en los homicidios, que es el estándar internacional”.
En el tema de la violencia contra la mujer explicó que han disminuido los homicidios, pero no los otros que son de violencia. En lo que va del 2025 se registra la muerte de 162 féminas.
“Lo más grave de esto es que todas las violencias ocurren en los espacios públicos y que su instrumento de lesión y muerte son las armas de fuego, de las que muchas de ellas son de tráfico ilícito”, lamentó Ayestas.
La sociedad machista es uno de los principales problemas que inciden para que haya violencia doméstica, intrafamiliar y femicidios, esa esa la manera de educación que impera en Honduras, acotó.
“Nos educan para que los hombres tengan el control y el poder, y a las niñas que no lo tengan, que sean las sumisas, y eso tiene que ver con el patriarcado. Estamos acostumbrados en el hogar a que las mujeres se quedan en la casa y los hombres son los que salen al mundo laboral”, subrayó.
Cerró diciendo, “Lo siguiente es que nos hemos acostumbrado y nos hemos vuelto insensibles al fenómeno, a tal grado que no se trabajan temas como la prevención de la violencia, ya sea prevención primaria, dotar de capacidades a los niños o prevención secundaria, que tiene que ver cuando un niño o una niña ha estado cerca de esas formas de violencia”. AB/Hondudiario