*** Además de los muchos admiradores, al velatorio acudieron numerosos compañeros de profesión, amigos cercanos y figuras del mundo del espectáculo italiano.

Varios cientos de personas acudieron este domingo a la capilla ardiente instalada en el ‘Piccolo Teatro Grassi’ de Milán para despedirse de la cantante Ornella Vanoni, fallecida el pasado viernes a los 91 años, icono de la música italiana y una de las personalidades más queridas de la ciudad.
A pesar del frío milanés, con temperaturas máximas de tan solo 6°C para este domingo, centenares de admiradores no dudaron en acercarse al teatro para rendir tributo a Vanoni (Milán, 1934), una de las figuras más ilustres de la ciudad.
El ataúd, de madera clara y rodeado de girasoles y rosas blancas, fue colocado bajo el escenario de la sala Grassi, en el mismo lugar donde, a los 18 años, la cantante inició su formación artística.
Hasta las 13:00 (12:00 GMT), más de 5.000 personas habían pasado por la capilla ardiente, según informó el concejal de Cultura de Milán, Tommaso Sacchi.
La capilla ardiente permanecerá abierta también mañana lunes, de 10:00 (9:00 GMT) a 13:00 (12:00 GMT), antes de que se celebre el funeral en la iglesia de San Marco en Brera, el barrio milanés en el que vivía la cantante.
Además de los muchos admiradores, al velatorio acudieron numerosos compañeros de profesión, amigos cercanos y figuras del mundo del espectáculo italiano.

El alcalde de Milán, Giuseppe Sala, también acudió a despedirse de Vanoni, de quien dijo “fue una persona muy importante” para la ciudad, por lo que quieren encontrar la manera de mostrar su agradecimiento y “dejar su legado”.
La cantante había solicitado que le dedicasen un jardín, aunque Sala insiste en que, en su opinión deben hacer “un poco más” para recordar a una de sus ciudadanas más ilustres.
Además, Sala anunció una jornada de luto ciudadano para mañana lunes.
Vanoni, una de las artistas más queridas, disfrutó de una carrera que abarcó más de 70 años, dejando en el repertorio canciones que rápidamente se convirtieron en himnos nacionales, como ‘Senza Fine’, junto a Gino Paoli.
Consolidada como una de las grandes damas de la música italiana, la noticia de su muerte desató de inmediato un aluvión de mensajes de condolencia del mundo del espectáculo.
Más allá de su sobresaliente carrera musical, Vanoni fue una presencia constante en la televisión y el teatro, y su participación en el Festival de Sanremo, donde participó en hasta ocho ediciones, consolidó su estatus como una de las artistas más queridas y admiradas del país. EFE



