*** exige una transición de gobierno responsable, advierte contra decisiones que comprometan al estado y llama al respeto de la institucionalidad democrática.
La Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), reconoce los esfuerzos realizados por el Gobierno de la presidenta Xiomara Castro de Zelaya, así como los desafíos estructurales y coyunturales que ha debido enfrentar durante su gestión, en un contexto nacional e internacional particularmente complejo.
Entre estos esfuerzos se identifican acciones orientadas a la recuperación institucional, la atención de la deuda social histórica, el fortalecimiento de sectores estratégicos del Estado y la búsqueda de mayor justicia social.
No obstante, la Máxima Casa de Estudios también es consciente de que los tiempos de país no son fáciles, que persisten limitaciones económicas, sociales y políticas profundas, y que Honduras requiere hoy más que nunca decisiones responsables, prudentes y visionarias.
En ese sentido, la UNAH solicita respetuosamente a la presidenta de la República que, en el marco de sus atribuciones constitucionales, instruya a los funcionarios y servidores públicos bajo su dirección para que se preparen acciones claras, responsables y documentadas que permitan una transición de gobierno ordenada, transparente y respetuosa del interés general.
De manera enfática, la Universidad exhorta a evitar decisiones administrativas, financieras o contractuales que comprometan de forma indebida las finanzas públicas, los recursos del Estado y cualquier bien público, especialmente considerando que el próximo gobierno aún no ha sido conformado, y que el proceso electoral se encuentra pendiente de declaratoria oficial por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE).
La UNAH pone a disposición del Estado hondureño y del próximo gobierno sus capacidades académicas, técnicas y científicas, reiterando que esta Máxima Casa de Estudios cuenta con expertos de los más altos estándares nacionales e internacionales, capaces de sugerir, recomendar y coadyuvar en la construcción de políticas públicas que mejoren de manera sostenible la condición del país. El acercamiento entre el Estado y la academia no debe ser excepcional, sino permanente y estratégico.
Se hace un llamado firme y categórico para que ningún partido político emita disposiciones de carácter gubernamental, ni instruya a secretarios de Estado o servidores públicos a actuar en función de intereses partidarios, ni mucho menos a obstaculizar o condicionar la continuidad institucional de la administración pública.
La UNAH exhorta a los consejeros del Consejo Nacional Electoral (CNE) a honrar el juramento constitucional que han rendido, cumpliendo y haciendo cumplir la Constitución de la República, recordando que su actuación se encuentra sujeta a lo dispuesto en el artículo 321 constitucional, que obliga a todo funcionario público a ejercer sus funciones con estricta sujeción a la ley.
Asimismo, se insta al CNE a apresurar su trabajo técnico y jurídico, disipar cualquier incertidumbre en el ambiente nacional y declarar al ganador del proceso electoral, teniendo presente que la fecha límite constitucional es el 30 de diciembre de 2025.
La UNAH hace un respetuoso pero firme llamado al próximo presidente de la República para que nombre funcionarios y funcionarias con las más altas competencias profesionales, priorizando la experiencia, la ética, la vocación de servicio público y la capacidad técnica.
Se exhorta a que ninguna función pública vuelva a concebirse como botín político, y a que se eviten de manera absoluta amenazas de despidos, venganzas políticas o persecuciones, ya que Honduras requiere armonía, estabilidad y una visión prospectiva que responda a las verdaderas urgencias de la población: empleo digno, seguridad ciudadana, salud, educación y el goce efectivo de los derechos fundamentales.
La UNAH hace un llamado a los candidatos y actores políticos a promover la sensatez y la no violencia a su militancia. Debe primar el interés nacional, la estabilidad del país y el bienestar de la ciudadanía, reconociendo que la convivencia democrática se fortalece con el diálogo, el respeto a la ley y el rechazo a cualquier forma de violencia o desinformación.
Se recuerda a los partidos políticos que de todo proceso electoral solo puede surgir un ganador, y que la voluntad soberana del pueblo hondureño debe ser respetada, evitando deslegitimar un proceso democrático que ha tenido altos costos históricos para el país y que no debe ser fuente de nuevas confrontaciones. AB/Hondudiario
