*** La socióloga enfatizó que la labor de las Fuerzas Armadas es “no deliberante” y apolítica.
[su_heading]Tegucigalpa, Honduras[/su_heading]
La exrectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, señaló que la función del jefe del Estado Mayor Conjunto de Honduras, el general Roosevelt Hernández, “no es política”, y a él debió haber emitido un comunicado oficial para explicar su reciente encuentro con el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López.
Según Castellanos, cuando el jefe de las Fuerzas Armadas toma una postura pública y arenga a otros sectores, está cruzando un límite que no le corresponde, ya que, como funcionario del Estado, tiene la obligación de rendir cuentas de manera institucional y no política.
La socióloga enfatizó que la labor de las Fuerzas Armadas es “no deliberante” y apolítica, por lo que cuando Hernández asume una posición de ataque, se convierte en un actor político, contraviniendo el mandato de su institución.
Por otro lado, Castellanos destacó que uno de los aspectos más relevantes de las declaraciones de la embajadora de Estados Unidos en Honduras, Laura Dogu, fue la caracterización de Padrino López como narcotraficante. “Esa es una acusación fuerte, y si la embajadora lo ha dicho, debe tener información fehaciente”, señaló la exrectora.
La socióloga advirtió que la decisión del gobierno hondureño de reunirse con un ministro señalado de tales actos podría acarrear consecuencias si la acusación resulta ser cierta.
“Que el gobierno de Honduras se reúna con un ministro de otro país con esas características ya es una decisión de gobierno que al final tendrá consecuencias, si es que en verdad es un narcotraficante”, comentó.
Estas declaraciones de Castellanos se dieron en respuesta a la reciente intervención del general Hernández, quien defendió su visita a Venezuela argumentando que se trataba de un país hermano y que la visita tenía como objetivo presenciar unos juegos de cadetes.
Hernández subrayó que su viaje no compromete la identidad ni la institucionalidad de Honduras, y reiteró que las Fuerzas Armadas continúan siendo una institución sólida. OB/Hondudiario
