*** La declaración de Gallardo resalta la preocupación del sector empresarial por el rumbo del país.
La presidenta del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), Anabel Gallardo, hizo este marte un nuevo llamado a la unidad nacional ante la creciente polarización política que vive el país, al tiempo que respaldó la convocatoria hecha por organizaciones religiosas para una jornada de oración por la paz en Honduras.
A través de una publicación en la red social X, Gallardo expresó: “Nos sumamos al llamado de la Conferencia Episcopal y la Confraternidad Evangélica, Honduras necesita diálogo, visión de país y soluciones reales, no disputas interminables entre los políticos. Honduras es de todos y trabajamos por el país que queremos dejar a nuestros hijos”.
La declaración de la presidenta del Cohep coincide con el llamado que hicieron la Conferencia Episcopal de Honduras y la Confraternidad Evangélica para realizar una caminata nacional de oración por la paz el próximo sábado 16 de agosto, como respuesta a la situación de incertidumbre social, política e institucional que atraviesa el país.
Ambas instituciones religiosas convocaron a los ciudadanos a unirse en oración y reflexión en todo el territorio nacional, como un acto simbólico para pedir por la reconciliación, el respeto a la institucionalidad y el fin de la confrontación entre los actores políticos.
La postura del sector privado se produce en medio de la crisis que afecta al Consejo Nacional Electoral (CNE), donde la consejera Ana Paola Hall puso recientemente su cargo a disposición, generando preocupación en diversos sectores ante la proximidad de los comicios generales.
Hall, representante del Partido Liberal ante el CNE, presentará su renuncia condicionada al Congreso Nacional, decisión que ha dejado en suspenso el futuro de la institución electoral.
En este contexto, la declaración de Gallardo resalta la preocupación del sector empresarial por el rumbo del país y aboga por soluciones constructivas y duraderas, alejadas de la confrontación entre los distintos poderes y liderazgos políticos.
La jornada nacional de oración del 16 de agosto se vislumbra como una oportunidad para que la sociedad hondureña, independientemente de sus credos y posturas ideológicas, se una en torno a un mensaje de paz, unidad y responsabilidad compartida. OB/Hondudiario
