*** En cada presentación, las palillonas no solo aportaron vistosidad al desfile, sino que también reflejaron la identidad y el orgullo de sus instituciones.
Las palillonas de los centros educativos de la capital fueron protagonistas del desfile patrio en Tegucigalpa, aportando color, dinamismo y elegancia a la celebración del 204 aniversario de Independencia. Cada colegio deslumbró con sus presentaciones, mostrando trajes diseñados para resaltar el encanto y la creatividad de los estudiantes.
Con uniformes azul brillante y sombreros bordados en plateado, un grupo de palillonas marcó el paso con precisión, acompañando con movimientos de bastón la música de su banda. Sus botas metálicas y el uso de cadenas plateadas en el vestuario completaron un estilo marcial con toques de glamour.
Otro conjunto destacó con trajes de terciopelo azul oscuro, decorados con bordados dorados en la parte superior, evocando un aire elegante y majestuoso. Las jóvenes realizaron rutinas coreográficas al ritmo de la música, ganándose los aplausos del público apostado a lo largo del bulevar Suyapa.
También se hicieron notar las palillonas que vistieron tonos celestes, con delicados detalles florales bordados en blanco y mangas traslúcidas que daban un aire de frescura. Con bastones adornados de tul y sonrisas radiantes, recorrieron las calles mostrando gracia y coordinación.
El colorido aumentó con un grupo que desfiló en trajes azul celeste con aplicaciones de lentejuelas fucsia y plumas rosadas en la cabeza. Su energía y alegría marcaron uno de los momentos más vibrantes de la jornada, contagiando entusiasmo a los asistentes.
Por su parte, un conjunto lució vestidos en tonos azul marino con dorado, complementados con coronas que realzaban su porte. Las jóvenes acompañaron su desfile con gestos de simpatía, como saludos y besos al público, que respondía con aplausos y vítores.
El rojo también tuvo protagonismo con palillonas que llevaron trajes bordados con pedrería y hombros descubiertos, acompañados de botas plateadas de caña alta. Su formación impecable y su entusiasmo fueron parte de las postales más llamativas del desfile.
Otro grupo optó por un estilo diferente, con uniformes blancos combinados con detalles dorados y sombreros rosas, evocando un aire festivo y juvenil. Sus coreografías, acompañadas de amplias sonrisas, resaltaron el espíritu de civismo y alegría de la jornada.
En cada presentación, las palillonas no solo aportaron vistosidad al desfile, sino que también reflejaron la identidad y el orgullo de sus instituciones, convirtiéndose en uno de los principales atractivos de la celebración patria. El público, que llenó las aceras bajo sombrillas y banderas, reconoció su esfuerzo con aplausos y ovaciones. OB/Hondudiario
